Victoriano Arenas- Argentino de Quilmes.
Un día de invierno crudo como cualquier otro, la excepción era el debut de Argentino de Quilmes en la divisional "D", unos dos grados en la ciudad de Buenos Aires, y empieza la odisea hacia el estadio de Victoriano, no esperábamos un estadio como el Amsterdam Arena, eso está claro, pero las condiciones que encontramos son dignas de ser contadas.
Todo empezó en un Fiat 147, salimos desde mi casa rumbo al estadio, no surgieron inconvenientes hasta llegar a la altura de Avellaneda, ahí tomamos la guía para saber que tan cerca del destino nos encontrábamos, y descubrimos que el estadio se encontraba en una especie de península o isla, rodeada por el riachuelo, lugar donde dicen algunos podría haber nacido el mismísimo Napoleón en lugar de la conocida isla de Corcega.
Nos detuvimos y preguntamos a un flaco que pasaba, "flaco..., disculpa, ¿la cancha de arenas?", el pibe no tenía idea, solo quedaba el camino empedrado delante, a un costado pibes jugan un picado con una pelota naranja, en unos arcos con los colores de Brown de Adrogué.
Dificultosamente logramos sortear los obstáculos, y una vez introducidos en el sendero, solo veíamos humo hacía adelante, un perro sarnoso revolcándose, y a los costados carteles(paredes pintadas con cal con algún grafitti) que decían como ir al estadio(¿Emboscada quizá?).
Finalmente dimos con la entrada al club, lugar donde nos recibía un cartel de "bienvenidos putos". Avanzamos metros con el auto, y estaba la entrada a un estacionamiento, local o visitante pregunta la vieja de la entrada, visitante respondemos, y nos manda por el pasillo(el pasillo es un descampado).
Caminos por el "pasillo", y dos tipos que venían de frente, pegan un grito...."ehhhhh gente", y nos señalan hacia un costado, sale un viejo quejándose del frio de una ventana casi oculta, y tira un chiste, después del partido pasen y le damos dos pesos, pasa que tendrían que pagar para que entre la gente acá, se rie un poco, y después si cobra las entradas.
Ingresamos al estadio, nos encontramos con dos tribunas, local y visitante, y en la local un pequeño vip(tribuna techada de 2 metros x 2, techada con chapa), alrededor solo descampado, y una descomunal cantidad de abono de caballo. Otra de las particularidades esta detrás de un arco, que da hacia el riachuelo, y la pelota solo se puede ir a buscar mediante una flota(un botecito pedorro).
Comienza el partido, el resultado es anécdotico, gano Argentino de Quilmes por 2 a 1. En pleno partido los policías boludeaban al alcanzapelotas, pidiéndole que les tire una bocha, para jugar en la base. Mientras tanto en la tribuna local, se halla un personaje peculiar, y probablemente el jefe de la hinchada de Victoriano, un gordo con un vozarrón importante, que grita Victorianooo, Victorianoooo.
Fue un típico partido del ascenso, esos partidos en los que los jugadores no marcan la diferencia, sino el hincha puteador que está pegado al alambrado puteando al Lineman.
Termina el partido, los intercambios de insultos entre hinchadas es constante, y a pesar de que los visitantes estaban en mayoría, el vozarrón empareja el duelo.
(De la página de Arenas conseguimos una perlita...., Cómo llegar al estadio: 178(ramal P) y 570. Los dos te dejan en la fábrica SIAM. Desde allí, caminar para adelante300 ó 400 metros y te topás con el estadio.)
Barbarroja
lunes, julio 31, 2006
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1 comentario:
Maravillosa descripción de la odisea!
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